Vendaje funcional en el esguince de ligamento lateral externo de tobillo. Revisión sistemática.

9 octubre 2021

AUTORES

  1. Paula Constante Pérez. Enfermera Urgencias en Hospital Universitario Miguel Servet.
  2. Vanesa Gómez Barranco. Enfermera Urgencias en Hospital Universitario Miguel Servet.
  3. Elisa Felipe Carreras. Enfermera Urgencias en Hospital Universitario Miguel Servet.
  4. Joaquín Cristóbal Sangüesa. Enfermero en Hospital Universitario Miguel Servet.
  5. Patricia Leal Campillo. Enfermera Urgencias en Hospital Universitario Miguel Servet.
  6. Cristina Benito López. Enfermera Urgencias en Hospital Universitario Miguel Servet.

 

RESUMEN

Las tres cuartas partes de las lesiones producidas en los tobillos son diagnosticadas como esguinces. En su mayor parte se originan por un movimiento de inversión forzada con afectación del ligamento lateral externo (LLE). Una de las pautas recomendadas es la inmovilización a través de los vendajes funcionales, que nacen como fruto de la evolución en los campos de la anatomía y la biomecánica.

El objetivo principal de este trabajo es dar a conocer la eficacia y beneficios del vendaje funcional en esguinces de tobillo. Para ello, se ha llevado a cabo una revisión sistemática con una búsqueda bibliográfica.

El vendaje funcional tiene diversas propiedades que mejoran la patología. Aunque son muchas las indicaciones de este tipo de vendaje, es importante conocer sus contraindicaciones y sus complicaciones.

El vendaje funcional permite un tratamiento mucho más selectivo de la lesión, ya que aporta una estabilidad máxima con modificación de la mecánica a la par que una movilidad selectiva y mantenimiento de la funcional. Una mala aplicación del vendaje puede agravar la lesión o entorpecer una evolución favorable. Es importante el conocimiento y manejo de este tipo de vendajes por parte de los profesionales de enfermería y de todo el equipo multidisciplinar.

 

PALABRAS CLAVE

Tobillo, esguince y distensión, vendaje, funcional, ligamentos tobillo, propiocepción.

 

ABSTRACT

Three-quarters of injuries to the ankles are diagnosed as sprains. Most of them are caused by a forced inversion movement with involvement of the external lateral ligament (LLE). One of the recommended guidelines is immobilization through functional bandages, which are born as a result of evolution in the fields of anatomy and biomechanics.

The main objective of this work is to present the efficacy and benefits of functional bandaging in ankle sprains. For this, a systematic review has been carried out through a bibliographic search.

The functional bandage has various properties that improve pathology. Although there are many indications for this type of bandage,it is important to know its contraindications and complications.

The functional bandage allows a much more selective treatment of the lesion, since it provides maximum stability with modification of the mechanics as well as selective mobility and maintenance of the functional one. A bad application of the bandage can aggravate the injury or hinder a favorable evolution. The knowledge and management of this type of bandage by nursing professionals and the entire multidisciplinary team is important.

Keywords

Ankle, sprain and strain, bandage, functional, ankle ligaments, proprioception.

 

INTRODUCCIÓN

Las tres cuartas partes de las lesiones producidas en los tobillos son diagnosticadas como esguinces. Un esguince es una distensión del complejo cápsulo-ligamentoso 1.

El esguince de tobillo o la inestabilidad lateral de tobillo (ILT) se define generalmente por una excesiva supinación o inversión del retropié sobre una pierna en rotación externa con un aumento de flexión plantar, siendo más frecuente una combinación de ambas al contacto inicial del retropié con el suelo durante la fase de la marcha 2.

En su mayor parte (casi un 85% de los esguinces de tobillo totales), se originan por un movimiento de inversión forzada con afectación de ligamento lateral externo (LLE) 1,2. El ligamento más frecuentemente involucrado es el peroneoastragalino anterior (Anexo 1)1.

La incidencia diaria es aproximadamente de un esguince por cada 10.000 habitantes. Hay de 2-3 veces más probabilidades de producir un esguince en el tobillo dominante 1,2.

En los deportistas las patologías ligamentosas representan un 38% del total de lesiones de aparato locomotor, siendo el baloncesto el que mayor incidencia presenta 40-50% 1,3,4.

El diagnóstico médico se realiza fundamentalmente mediante la exploración clínica y solo está indicada la realización de estudio radiológico si hay dolor al palpar los maléolos, el escafoides y/o en la base del quinto metatarsiano 1.

Según el grado de la lesión, los esguinces de tobillo se clasifican en 3 grados:

  • Grado I o leve: distensión o elongación sin rotura ligamentosa. Con ligero edema, dolor y escasa pérdida funcional. No existe equimosis.
  • Grado II o moderado: desgarro parcial. Es posible caminar, pero con gran dificultad, presenta mayor dolor y edema en “huevo de paloma” inmediato, que puede desaparecer más tarde. Posteriormente hay tumefacción articular y equimosis tardía (tras 18 horas de evolución).
  • Grado III o grave: desgarro completo. Con incapacidad de apoyar el pie, importante edema y dolor intenso, aunque puede estar ausente por rotura de fibras nerviosas eferentes. Aparece hematoma instantáneo, que es patognomónico de este grado 1,5.

Según el mecanismo de producción los esguinces suelen producirse por una torcedura lateral o medial. Existen dos tipos según la zona afectada:

  • Esguince de inversión: el pie gira hacia adentro (rotación interna del tobillo) desde una posición en flexión plantar, es el más frecuente, ya que la estabilidad ósea es mayor en la cara lateral interna o medial, lo cual tiende a forzar el pie hacia la inversión en lugar de la eversión. El ligamento más afectado es el LLE.
  • Esguince de eversión: se produce por giro del pie hacia afuera (rotación externa del tobillo), siendo el ligamento afectado lateral interno 1.

La frecuencia de los esguinces de tobillo requiere un conocimiento del tratamiento inmovilizador. Fruto de la evolución en los campos de la anatomía y la biomecánica nace el concepto del vendaje funcional, técnica que permite sanar lesiones en un plazo de tiempo menor y de manera más funcional, evitando en gran medida los inconvenientes producidos por las inmovilizaciones rígidas prolongadas en el tiempo 1,6.

Esta técnica limita o inhibe un movimiento doloroso y permite el resto de las acciones de esa parte del cuerpo. De esta forma protege la cicatrización del ligamento lesionado a la vez que permite cierto grado de movimiento en la articulación sin riesgo para ésta 1.

El personal de enfermería deberá adquirir la suficiente destreza en este tipo de procedimientos para poder dar un servicio de calidad en el producto enfermero 1.

 

OBJETIVOS:

Objetivo general

  • Dar a conocer la eficacia y beneficios del vendaje funcional en esguinces de tobillo.

Objetivos específicos:

  • Actualizar los conocimientos del personal de enfermería sobre el uso y beneficio de la técnica del vendaje funcional.
  • Desarrollar la técnica del vendaje funcional para esguinces de tobillo.
  • Explicar el material necesario para realizar el vendaje funcional de tobillo.
  • Conocer las indicaciones, contraindicaciones y complicaciones derivadas del vendaje funcional.
  • Promocionar la importancia del papel de enfermería en la aplicación y cuidados del vendaje funcional.

 

METODOLOGÍA

Se ha llevado a cabo una revisión bibliográfica del tema mediante una búsqueda bibliográfica.

Para ello, se han consultado diferentes bases de datos tales como: Pubmed, Cuiden, Sciencedirect, Dialnet y Enfispo. Como buscadores bibliográficos se han utilizado Google Académico y Alcorze. También se han incluido libros.

Como criterios de inclusión, los artículos debían estar en español o inglés y con texto completo y que estuvieran relacionados con el uso del vendaje funcional en patologías musculoesqueléticas y con los vendajes utilizados para el manejo de los esguinces de tobillo. Otro criterio ha sido el periodo de publicación que ha sido de 20 años (desde 2001 hasta 2021).

Se han excluido aquellos documentos que no tratan los objetivos del estudio, los artículos duplicados y documentos con acceso limitado.

 

RESULTADOS

Los vendajes funcionales constituyen un tipo de técnica de inmovilización muy selectiva, con unas indicaciones concretas, que permiten curar un tipo de lesiones concretas en el plazo más corto de tiempo y con un resultado más funcional, evitando las secuelas que producen las inmovilizaciones prolongadas 7.

Tipos de técnicas

  1. Técnica de contención. El vendaje limita el movimiento que produce dolor. También se denomina técnica blanda por el tipo de material empleado. Se utilizan vendas elásticas puras, cohesivas y adhesivas. Es una técnica eminentemente terapéutica y deportiva.
  2. Técnica de inmovilización. El vendaje anula el movimiento que produce dolor. Se define como una técnica dura por uso de vendaje rígido. El material ideal para trabajar esta técnica es el esparadrapo (tape). El más usado es el de 3.8 cm de ancho. Para articulaciones pequeñas se emplea el de 1 cm y para articulaciones grandes el de 5 cm de ancho. Todo el tape tiene una longitud estándar de 10 m de largo. Se considera una técnica preventiva o profiláctica dentro del deporte.
  3. Técnica mixta o combinada. Se emplean los principios de las dos anteriores. Los materiales idóneos son vendas adhesivas o cohesivas, que se refuerzan con tiras de tape. Para evitar lesiones al rasurar la piel o alergias por el esparadrapo o el aerosol aislante, se recomienda utilizar un prevendaje (pretaping), que protege la masa adhesiva de la piel 1.

Propiedades:

  • Mecánica: capacidad de sustituir la acción fisiológica.
  • Exteroceptiva: (en vendajes colocados directamente sobre la piel) aumento de las sensaciones de origen cutáneo (tacto, dolor, presión, frío/calor).
  • Propioceptiva: aumento del tono muscular y una mayor atención del paciente.
  • Psicológica: sensación de confianza y seguridad, ambas de gran importancia teniendo en cuenta la relación estabilización/funcionalidad 1,7,8.

Material:

  • Prevendaje o pretaping.
  • Placas de protección o almohadillados.
  • Vendas elásticas
  • Tape
  • Tijeras 1.

Técnica del vendaje funcional en tobillo: (Anexo 2) 1,8.

  1. El tratamiento inicial del esguince del LLE de tobillo pertenece al protocolo RICE (Reposo, Hielo, Compresión y Elevación). Transcurridas las primeras 48-72 horas se plantea la inmovilización parcial en los grados I (leve) o II (moderado).
  2. Revisar piel de tobillo: valorar que no hay heridas, edemas, lesiones o alergias que contraindiquen la inmovilización.
  3. Proteger con material almohadillado (pretape o prevendaje), sobre todo el tendón aquíleo.
  4. Colocar tira de anclaje proximal a nivel de la unión del tercio medio con tercio inferior de la pierna y otra distal a nivel de raíz de dedos, quedando ambas abiertas en la cara posterior. Las tiras de anclaje quedarán abiertas en la cara posterior de la pierna y en la planta.
  5. Con tobillo en flexión de 90°, colocar tirar activa longitudinal a modo de estribo, que discurre desde cara interna del anclaje proximal hasta cara externa del mismo pasando por talón. Colocar otra tira activa transversal desde cara interna de anclaje distal hasta cara externa del mismo pasando por la región aquílea. Al anclar ambas tiras se ejercerá una ligera tracción con el fin de relajar el LLE y se colocará una tira de sujeción superpuesta a la tira de anclaje.
  6. Repetir tiras activas en número suficiente para limitar movimiento de inversión de tobillo, manteniendo la superposición en talón y región aquílea, desplazándose ligeramente hacia la cara anterior de la pierna y dorso del pie.
  7. De forma optativa, y con el fin de limitar más el movimiento de inversión, se puede colocar una tira de refuerzo partiendo del dorso del pie, cruza por la cara plantar hasta llegar al talón y asciende por la cara externa de la pierna hasta anclaje proximal.
  8. Colocar tiras de encofrado para cerrar anclajes, que recorrerán todo el vendaje dejando sin cubrir la parte anterior de la articulación del tobillo para no limitar la flexo-extensión.
  9. Comprobación de la comodidad del paciente y efectividad del vendaje.
  10. El vendaje funcional se renovará con una periodicidad de 4-5 días. La técnica de coloración será la misma, pero se aplicará menor tensión con el fin de aumentar progresivamente la capacidad de inversión.
  11. Para la retirada del vendaje, se lleva a cabo con unas tijeras de punta roma. El lugar en el que comenzar a cortar el sistema no es banal, pues debe facilitar el acceso del utensilio en cuestión y evitar en lo posible el encuentro con relieves óseos 1,8,9.

Indicaciones:

El vendaje funcional está indicado en cualquier articulación con distensiones de primer grado y algunas de segundo, prevención de las laxitudes ligamentosas, roturas de fibras musculares, distensiones y elongaciones musculares, fisuras de huesos largos (metatarsianos), fisuras de costillas, esguinces intercostales, neuralgias intercostales, tras la retirada de escayola para iniciar el período de rehabilitación, descarga en la tendinitis y en la fascitis plantar 1,9.

Contraindicaciones:

No está indicado en roturas tendinosas, ligamentosas y musculares, fracturas, edemas, problemas de circulación de retorno (varices, fragilidad vascular), heridas importantes, enfermedades cutáneas extensas, alteraciones sensitivas, alergias a las masas adhesivas, lesiones sin diagnosticar 1,8,9.

Complicaciones:

  • Dermatológicas:
    • Derivadas del rechazo a los adhesivos, principalmente a los convencionales (caucho y óxido de zinc) ya que los compuestos de poliacrilatos son de tipo hipoalergénico. Aunque, en un porcentaje considerablemente inferior, también estos últimos pueden producir rechazo. A fin de evitarlo, se recomienda la utilización de sprays adhesivos y prevendajes.
  • Neurovasculares:
    • Producido sobre todo por una aplicación inadecuada de las vendas. Por ello es recomendable conocer perfectamente las características técnicas de cada venda y su comportamiento sobre las distintas zonas anatómicas. Para prevenirlo está especialmente indicado la utilización de distintos tipos de material de almohadillado 1,8,9.

Ventajas:

  • Mejora la circulación sanguínea y linfática al permitir la movilización activa.
  • Favorece la eliminación de hematomas y edemas.
  • Es compatible con la aplicación de otras medidas terapéuticas.
  • Acorta los plazos de recuperación.
  • Representa un apoyo psicológico para el que lo porta 9.

Cuidados de enfermería:

El procedimiento se registrará en la historia de enfermería, anotando el inicio y posteriores recambios de los vendajes. Se le darán pautas de cuidados generales de vendajes a los pacientes (no mojar el vendaje, vigilar signos de excesiva compresión venosa, irritaciones cutáneas, defectos en la colocación de las tiras por exceso o defecto, así como la existencia de arrugas en el tape que produciría roces y alteración de la dinámica en la marcha, etc.) 1.

 

DISCUSIÓN

El tratamiento clásico de los esguinces de tobillo, sobre todo en el primer episodio, mediante inmovilización prolongada con bota de yeso se está sustituyendo progresivamente por el tratamiento funcional para evitar la rigidez articular y la atrofia muscular 3.

El vendaje funcional permite un tratamiento mucho más selectivo de la lesión, ya que aporta una estabilidad máxima con modificación de la mecánica a la par que una movilidad selectiva y mantenimiento de la funcional. Por lo tanto, la cicatriz es mucho más funcional, evitando además atrofias musculares y rigideces articulares que retrasan la recuperación 1.

Sin embargo, debemos recordar que está indicado en distensión de primer y segundo grado, prevención de laxitudes ligamentosas y distensión musculares, pero su uso está contraindicado en roturas tendinosas, ligamentosas y musculares, así como en fracturas 1,8,9.

El vendaje debe ser eficaz, nunca peligroso. Una mala aplicación del vendaje puede agravar la lesión o entorpecer una evolución favorable. El máximo beneficio del vendaje se obtiene con una confección firme y uniforme, sin comprimir en exceso, empleando una presión homogénea durante todo el vendaje. Una excesiva presión en determinados puntos o un reparto desigual de la misma puede alterar la circulación sanguínea y linfática, con el consiguiente perjuicio para el proceso de reparación tisular 9.

Las claves para obtener un buen resultado con el uso de esta variedad terapéutica son la colocación rigurosa del vendaje y el seguimiento y revisión periódicos del mismo, así como la colaboración por parte del paciente, tanto en su cuidado como en la rehabilitación 3.

 

CONCLUSIONES

El vendaje funcional pretende disminuir la tensión generada o transmitida a los distintos tejidos biológicos implicados en la lesión, tanto capsulo-ligamentosos, como tendinosos o musculares, protegiéndolos contra la recidiva o el agravamiento y asegurando una óptima cicatrización de los mismos, a expensas de un control del edema y de la sensación dolorosa. En definitiva, estabilizar, suplir y/o reforzar determinadas estructuras anatómicas 9.

Es importante el conocimiento y manejo de este tipo de vendajes, no sólo en los esguinces de tobillo sino en otras patologías, ya que han demostrado su eficacia y seguridad 1,3,9.

Además, cabe destacar la importancia de que este conocimiento no solo debe ser por parte de los profesionales de enfermería, sino de todo un equipo multidisciplinar como médicos, traumatólogos, rehabilitadores, fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales con el fin de mejorar el diagnóstico y tratamiento de patologías traumatológicas 1,3.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. Pérez Pejenaute F, Usan Villanueva J, Gil Casado A, Sesma Sánchez MT, Ochoa Alfaro B, Los Arcos Cirauqui MA. Vendaje funcional en el esguince de tobillo. Recomendaciones para Enfermería. NURE Inv [Internet]. 2011 [citado 17/05/2021]; 8(55): 1-5. Disponible en: http://www,fuden.es/FICHEROS_ADMINISTRADOS/PROTOCOLO/NURE55_protocolo_vendaje.pdf
  2. Chana-Valero P. Eficacia del ejercicio propioceptivo combinado con vendaje neuromuscular en la inestabilidad funcional de tobillo. Reduca. 2010; 2 (1): 255-272.
  3. Ávila-Lafuente JL, Laclériga-Giménez A, Sánchez-López A, Bolsa JA. Protocolo de tratamiento funcional en el esguince agudo no grave de tobillo. Alta laboral precoz. Mapfre Medicina. 2002; 13: 248-251.
  4. Sánchez-Ramos A. Esguince de ligamento lateral externo de tobillo. El Peu. 2002; 22(2): 64-70.
  5. Strujis P, Kerkhoffs G. Ankle sprain. Clinical Evidence; 2010; 05; 1115.
  6. Bueno-Cardona JM, Jiménez-Vinuesa NS. Actualización en vendajes funcionales para profesional de enfermería. [Internet]. 2014. [citado 17/05/2021]. Disponible en: https://w3.ual.es/congresos/educacionysalud/ONLINE/158.pdf
  7. Maestro Savedra J. Taller de vendajes funcionales. Primaria. 2012: 1-36.
  8. Holgado Catalán MS. Vendajes funcionales en pediatría. Form Act Pediatr Aten Prim. 2009; 2(2): 107-111.
  9. Medina I, Luque A. Vendajes funcionales en traumatología deportiva. 1ª ed. Málaga. Canales 7 Servicios Editoriales. 2009.

 

ANEXOS en artículo en PDF

Publique con nosotros

Indexación de la revista

ID:3540

Últimos artículos